lunes, 18 de agosto de 2014

Reflexiones sobre la paciencia

I. 
“Hay ofensas que son intencionadas y esto está mal. Pero muchas veces sucede que una determinada acción o forma de ser, es acogida por la parte herida de una sensibilidad y se capta como ofensa. ¿Cómo perdonar un perjuicio ignorado? ¿Cómo custodiar la propia sensibilidad para dejar de acoger lo del otro como maltrato?”

No hay comentarios:

Publicar un comentario